sábado, 27 de septiembre de 2008

LA GESTION DEL AULA SE BASA EN LA PREVENCIÓN

En esta ocasión trataremos sobre la gestión en el aula que es el conjunto de comportamientos y de actividades del profesor encaminados a que los alumnos adopten una conducta adecuada y a que las distracciones se reduzcan al mínimo, concepto hecho por Emmer (1987), otro concepto manejado y que va muy de la mano con la gestión escolar es la buena disciplina que es la que permite crear un ambiente agradable en el aula tanto como el profesor como para el alumno provocando un cierto clima por la forma en que se trabajan con las dimensiones espaciales y temporales de su aula Max Va Manen (1998); permitiendo así un nuevo significado a la disciplina como el castigo de malas conductas después de que se producen comúnmente ejercidas por los docentes.

Hablando un poco mas a fondo sobre la lectura esta nos permite conocer algunas de las habilidades que permite crear una buena gestión como lo es el dominio-control en donde el maestro sabe lo que pasa en el aula, dando hincapié a otra habilidad como lo es encabalgamiento donde el docente puede atender dos asuntos a la vez sin entorpecer la actividad de aprendizaje.

Algo que me llamo mucho la atención fue sobre cuando y donde el profesor puede hacer un cambio de actividad, que se puede presentar de una forma eficaz y uniforme o lenta y violenta; para lo cual se propone usar el ritmo que es la ausencia de desaceleraciones logrando el movimiento de la clase en actividades académicas; el otro concepto es la uniformidad siendo la ausencia de conductas que producen un movimiento a trompicones.

A través de estos cincos malos hábitos (Idas y Venidas, Fragmentación, Dejar-colgados, Reacción-a-cualquier-estimulo y Empujones y Insistencia exagerada); la primera se refiere a cuando el profesor termina una actividad, comienza con otra y regresa a la primera actividad; la segunda consiste en dividir la actividad en subpartes (trompicones) cuando podría realizarse como una sola; la tercera el profesor empieza una actividad y reacciona dejando a la clase desconcertada; la cuarta habla primeramente como el caso de la tercera por cualquier acontecimiento el profesor deja a los alumnos desconcertados y los empujones cuando el docente interrumpe al alumno sin importale lo que este haciendo el alumno; el quinto es cuando el docente me mantiene por asi decirlo aferrado a un tema mucho más de lo necesario para que los alumnos lo entiendan.

Para mantener a los alumnos en la clase se denomina Alerta de grupo cuando el profesor mantiene alerta a los que no están interviniendo, mientras otro alumno lo está haciendo o antes de determinar quién lo va a hacer, para lo cual se recomiendo cuestionar de forma aleatoria al grupo, también no mencionar al alumno que vaya a responder, dejar la pregunta libre para quien la quiera contestar, comentarles a los alumnos que no están participando que se les puede preguntar que es el aporte de su compañero a la clase.

La lectura me pareció fascinante por los conceptos que maneja y es la primera vez que alguien menciona algunas estrategias para tener una gestión en el aula o buena disciplina, aprendí algunas estrategias que puedo usar en mi practica el próximo 20 al 24 de Octubre como lo son llegar a conocer bien y pronto a los alumnos. No permitir que se crean amparados por el anonimato.

No castigar a toda la clase por las faltas cometidas por un alumno.

No hacer amenazas imposibles y sobre todo tratar de parar los conflictos o actividades que entorpezcan la clase antes de que se vuelvan más grandes; todas estas y algunas otras más me permitirán tratar de llevar a cabo una buena jornada de prácticas.

Bibliografía
-Davis , Gary A. y Margaret A. Thomas (1992), “La gestión del aula”, en Escuelas eficaces y profesores eficientes, Roc Filella Escolà (trad .), Madrid, La Muralla (Aula abierta), pp. 113-126 y 142-145.

-Manen, Max van (1998), “El tacto pedagógico” y “El tacto y la enseñanza”, en El tacto en la enseñanza. El significado de la sensibilidad pedagógica, Barcelona, Paidós (Paidós Educador, 135), pp. 159-214.

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